Señor Jesús Pastor bueno, Pan de Vida Eterna bajado del cielo que elegiste a a la Venerable Sierva de Dios María Francisca de las Llagas para que consagrada a ti asumiera el riesgo de fundar en tu Iglesia un nuevo instituto de vida religiosa con el carisma de adoración y reparación eucarística. Concédenos por su intersección llegar a ser como ella, adoradores del padre Celestial, en espíritu y verdad. Apóstoles decididos para la extensión del Reino de Santidad, de gracias de verdad, vida de Justicia, amor y Paz. Amén

Padre nuestro, Ave María y Gloria…