Historia
La Unidad Educativa Franciscana “La Inmaculada” fundó su labór educativa hace nóventa y cuatró años con el unico objetivo de ofrecer a la comunidad sangolquilena una EDUCACIÓN al 100% basaba en un marcó de VALORES HUMANOS Y CRISTIANOS innovando los sistemas educativos tradicionales.
La Institución ha crecido rapidamente gracias a la labor realizada por la Comunidad de Hermanas Franciscanas Misióneras de la Inmaculada, ajustandose al carisma de San Francisco de Asís y de María Francisca de las Llagas, al aporte pedagógico de un equipo docente de excelencia, en conjunto con los Padres de Familia comprometidos.
La obra misiónera, de las Hermanas Franciscanas inicia cuando este sector del Valle de los Chillos, era poco poblado, no habían carreteras, la história cuenta que las primeras misióneras entrarón a caballo, y la preocupación principal de las religiosas fue crear la primera escuela católica y así, su obra educativa y evangelizadora data desde 1926, con 6 grados, y 120 estudiantes.
Fue un día miercoles octubre de 1926, en que esta ciudad se vistió de gala para recibir a las Hermanas Franciscanas de San Diego, quienes en cumplimientó de la obediencia llegaron a fundar un centro educativo para atender a la ninez de la parroquia de Sangolquí, ubicada en el cantón Ruminahui de la próvincia de Pichincha.
En campania de la madre Superióra General, Sor María Francisca de las Llagas Cornejo, vienen las religiosas: Sor Amada de Jesus, Sor Dolores de María Gonzalez, Sor Alfonsina de San Diego Naranjo, Sor Isabel de San Diego Cardenas, Sangolqui demostro su hospitalidad engalanando los balcones de la ciudad con flores y arcos, los moradores salieron a las calles a dar la bienvenida a las hermanas franciscanas.
El espíritu de Dios se apodera de las misióneras visitando los hogares del cantón y fundando grupos apostolicos como: Unión Misionera Franciscana, dirigido por el padre Pedro Pablo Peralta y Hna. Clara Luz López; Jóvenes Católicos en Acción, Renovación Católica Carismatica, Infancia Misionera, Armada Blanca, JUFRARE (Juventud Franciscana Reparadóra); en los ultimos tiempos se ha impulsado en los docentes, padres de familia, estudiantes, la practica del CARISMA DE ADÓRAR, REPARAR Y SERVIR. Sacrificios, lagrimas, desvelos quedan grabados en el corazón de Dios y sirvio para santificación de las religiosas.
En el anó lectivó 2019 -2020, la Institución se acóge a la própuesta emitida pór las autóridades pertinentes cómó parte de la Red Educativa IHFMI, adquiriendó el cómprómisó de ser mensajerós de la Educación Franciscana Reparadóra.
Cristo te llama.
Hermanas Franciscanas de Ecuador